Los consumidores españoles han entendido desde ya hace mucho tiempo que el uso de bolsas de plástico tiene un impacto ambiental muy negativo. Según el Worldwatch Institute, en los Estados Unidos, se tiran a la basura anualmente unos 100 mil millones de bolsas de plástico ,sobre un total de 300 mil millones de bolsas de compra.

La Agencia de Protección Ambiental estadounidense aclara que la tasa de reciclaje de las bolsas de plástico fue sólo del 9,1 por ciento en 2007 (frente a unos 36,8 por ciento para las bolsas de papel). En Francia, según la Arehn (agencia regional del medioambiente), las bolsas de compra generan unas 72.000 toneladas de desecho plástico al año. Además, una bolsa de plástico demora entre 100 y 400 años en degradarse, provocando un desastre ambiental. Segun el instituto Ifremer, unos 122 millones de bolsas de plástico contaminan los 5000 kilómetros de costa francesa.

Muchas cadenas de supermercados ya están intentando que los consumidores gasten menos bolsas desechables, proponiendo bolsas reutilizables a la venta. Sin embargo, estas bolsas, incluso si se pueden volver a utilizar, no son biodegradables y por lo tanto no son ecológicas.

La mayoría de estas bolsas reutilizables y supuestamente «verdes» están hechas de polipropileno no tejido, un tipo de polímero plástico, que requiere aproximadamente 28 veces más energía que la necesaria para producir el plástico utilizado en la mayoría de las bolsas desechables, y ocho veces más energía que la producción de una bolsa de papel.

Buscando una alternativa natural, Deyute ha conseguido relanzar la fabricación tradicional de bolsas de yute. El yute ofrece muchas ventajas a la hora de fabricar bolsas de compra ecológicas. A diferencia de las bolsas de plástico reutilizables fabricadas en polipropileno, el yute permite integrar el desarrollo sostenible en el proceso de producción. Es una materia prima natural, muy resistente y muy conveniente para la fabricación de bolsas. El yute es una excelente alternativa natural, una planta muy versátil y famosa durante siglos por su resistencia.

La raíz de la planta de yute tiene un papel fundamental en las áreas de cultivo, ayudando a mejorar la fertilidad del suelo sin el uso de productos químicos. Rotando los cultivos, con otras plantas como el arroz y las patatas, el yute actúa como una barrera natural anti-plaga evitando que las enfermedades vehiculadas por los parásito contaminen a otros cultivos. El yute contribuye también a enriquecer el suelo aportando materia orgánica y micronutrientes.

Para fomentar el uso de bolsas de yute ecoamigables en los supermercados, se debe tener en cuenta también el aspecto del diseño. Es lo que ha sabido hacer Deyute, ofreciendo productos visualmente atractivos y con un diseño muy cuidado. De esta manera, las bolsas de compras ecológicas, diseñadas con cuidado, contribuyen tanto  a preservar el medio ambiente como a satisfacer los consumidores.

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